Te amaré completamente, tal vez no de manera perfecta, pero si eternamente; es posible que el miedo nunca se vaya, pero la fe en nuestro amor permanecerá por siempre…
Algún día serás mía,
aunque sigas luchando contra ti misma,
aceptarás que nuestro destino
es caminar juntos por el sendero oculto
de nuestra pasión prohibida.
Si supieras del mágico mundo que has creado para mí,
con tu sonrisa y esos pequeños detalles
que cada día se transforman en el sentimiento más puro
desde el primer instante en que te vi.
Te quiero como un secreto inconfesable,
como un sueño que solo tú y yo podemos descifrar;
te quiero como algo inalcanzable,
y aun así, podría hacerlo realidad con tu voluntad.
Las estrellas brillan, pero no iluminan mi noche,
mis pensamientos vagan, buscándote en cada rinconada.
El eco de tu risa aún resuena,
anclado en el tiempo, en la promesa que el viento no se llevó.